Can i have your son for the rest of my life? (ls)

PLAYLIST

rude-MAGIC!

Cliché-mxmtoon

All of me-John Legend

Perfect-Ed Sheeran

Crazy Little Thing Called Love-Queen

Don't feel like dancin'-Scissor Sisters

PERSONAJES

LOUIS TOMLINSON (omega bc louis omega mi felicidad cjau)

HARRY STYLES (alfa)

AVISO

Este es un os basado en la canción principal que es rude de Magic! <3

Si hay algún error, sorry es culpa del cel

Si les gusta voten y comenten porfa

Portada temporal bc a

Tengo varios os que estoy en proceso así que PRESIONEN porfa

Estaba nervioso, era algo obvio. Había hablado con su chico de ojos azules varias veces sobre el tema y no estaba seguro de cómo iba a reaccionar. Sabía lo suficiente para saber que los padres del omega eran las personas más complicadas que podrían existir. Nada les parecía bien. Nada les parecía suficiente y sobre todo si se trataba del rizado.

Debes traer a mi hijo a la una de la mañana como máximo, lo trae a las doce, pero decide que escuchó mal y debió ser más temprano.

Trae un hermoso pastel para el cumpleaños de su hijo que hace que lo abrace con emoción, pero debió ser más grande.

Decide tener una cita con su hijo y decide que justo ese día tienen una cena familiar.

Estaba harto, pero lo soportaba porque sabía bien cómo lidiar con ellos. Según el de ojos azules nunca habían tratado tan mal a los jóvenes que entraban a su casa como lo hacía con él y la respuesta era muy clara para el alfa.

El omega tenía 22 años en ese momento y el alfa 32 años cuando se conocieron. El de ojos azules le contaba como el rizado fue su primer novio oficial y que cuando traía a un joven 2 años mayor ya lo miraban con mayor determinación. Ahora tenían 25 y 35 años y no se imaginaban estar separados ni por un segundo más.

-Entonces estoy jodido, eso me quieres decir- dice el de ojos verdes observando al omega soltar una risa, mientras ambos estaban acostados en el bosque.

-No, claro que no. Me refiero a que tal vez debas resignarte- dice encogiéndose de hombros.

-Louis, no me pienso resignar. Nos vamos a casar, lo quiera el insoportable de tu padre o no. - dice el alfa viendo a Louis sonreír y volver a mirar a las estrellas.

-Si así lo dices, Harry- dice Louis tomando la mano del rizado que no puede evitar sonreír. -Que tontería la de pedir permiso al padre o madre para casarse. - dice el de ojos azules haciendo una mueca.

-Sí, la verdad sí. Tu padre es un hombre pasado de moda - dice Harry haciendo una mueca, porque amaba al de ojos azules y desde la primera vez que lo vio, sabía que era su destinado e incluso intentó sacar esas ideas de su mente, pues las circunstancias no eran las mejores, o al menos no lo fueron luego de un tiempo.

Era un lunes en la mañana cuando el rizado se levanta con ganas de tirar el celular por la ventana, pero al mismo tiempo con el nerviosismo corriendo por sus venas. Hoy era el día que iban a anunciar en el trabajo a los nuevos gerentes y empleados. El alfa solo tenía 32 años y ya era muy querido en la empresa, pues empezó a trabajar para ella desde que se graduó de la Universidad. Su jefe le había dicho que tenía gran potencial para llegar a ser gerente y estaba seguro de que lo iba a conseguir, pero no podía evitar tener un extraño sentimiento de nerviosismo. Aunque no debía, porque el jefe se había vuelto un gran amigo suyo.

Por otro lado de la ciudad se encontraba un joven omega preparándose para su primer día como empleado en una de las mejores empresas del mundo. Estaba algo nervioso del que dirán, pues para ser sincero conseguir el empleo fue algo sencillo. Su padre era el jefe, pero obviamente no lo iba a poner como algún gerente, pues necesitaba experiencia primero.

El primero en llegar a la empresa era el joven rizado que se acomodaba su camisa cada cinco segundos en el ascensor. Necesitaba causar una buena impresión, porque había otras 10 personas que querían su mismo puesto. La reunión iba a empezar en unos minutos y observa a su jefe entrar por las puertas. Todos los presentes se ponían de pie con el mismo nerviosismo.

-Buenos días, jóvenes. Las entrevistas van a empezar. Cabe recalcar que los ensayos los revise hace unos días y tengo en mente algunos de ustedes, pero está entrevista puede ser su salvación como su ruina. Voy a llamar uno por uno. Primero, Perrie Edwards. Se va preparando Zayn Malik.- dice mientras la joven alfa se levantaba de su asiento con decisión a tener el empleo.

El rizado sabía que sería el último a quién llamará y no estaba seguro de si eso era una buena o mala noticia.

Mientras tanto, un joven omega se encontraba demasiado nervioso, su padre le había dicho que no podía tener favoritos y acompañarlo a todos lados. Sabía que tenía razón, pero no podía evitar ponerse nervioso. Louis comienza a caminar por los pasillos hasta encontrar a una joven alfa. El omega se acerca y la joven sonríe como si lo estuviera esperando.

-Hey. Debes ser Louis. Tu escritorio tiene tu nombre y esta al costado del mío. Tu padre me pidió para apoyarte, pues puedes llegar a ser algo nervioso. - dice la joven viendo al omega asentir. -Bien, tu escritorio es el de la silla azul. Cuando estés listo me avisas para darte unos folletos, pero sería bueno que no pases de los 20 minutos. Soy Zendaya-dice con una sonrisa la joven, viendo al omega asentir despidiéndose para irse hasta su escritorio y ordenar sus papeles, sintiendo más nerviosismo de lo normal.

El rizado había terminado su entrevista y observaba con nerviosismo a su jefe que lo miraba con curiosidad, o al menos hasta que suelta una risa emocionada.

-Felicitaciones, Styles- dice su jefe mientras el rizado lo mira confundido. -¡Eres el nuevo gerente!- dice el Sr. Tomlinson, mientras el rizado le agradecía con entusiasmo. -El área que se te será asignada te la voy a presentar de una vez, para que vayas conociendo a los jóvenes- dice el alfa viendo al rizado asentir con emoción. -Hay tres empleados nuevos y agradecería que les tengas un poco de paciencia por eso mismo. - decía saliendo de la sala de entrevistas para comenzar a caminar hasta el ascensor y pulsar el quinto piso.

El Sr. Tomlinson caminaba junto al rizado hasta estar en el área dónde se encontraba su equipo. Todos se levantaban y saludaban al alfa. -Bueno jóvenes, les presento a su nuevo jefe en el área, el joven Styles. Ya conoces a la mayoría, pero déjame presentarte a los nuevos empleados. -El alfa presenta a los dos jóvenes con rapidez, mientras estos alzaban la mano, pero cuando iba a anunciar un tercer nombre hace una mueca.

-¿Dónde está Louis?- dice confundido el señor, mientras Harry alzaba una ceja al escuchar como era al único que decía por su nombre, pero sobretodo que le resultaba conocido.

-Aquí estoy-dice Louis pasando por su lado con rapidez para llegar a su asiento, pero era suficiente tiempo para que Harry sienta como su corazón late más rápido por el increíble aroma del omega y cuando este se voltea para verlos, sabe que está en serios problemas al observar el color de sus ojos y como podría ahogarse en ese hermoso océano.

-Oh, ahí estás. Bueno, él es Louis, mi hijo. Trata de no darle muchas preferencias por eso- dice su jefe, Harry observaba al bonito omega sonreír y sabe que definitivamente es su perdición.

De nuevo. Después de una noche en un bar de las afueras hace menos de tres meses. Claro que lo recordaba, porqué, ¿Cómo podría olvidar a su propio omega?

Ambos siguen viendo las estrellas tomados de la mano hasta que el joven rizado se sienta con prisa, dejando confundido al de ojos azules. -Voy a pedirle permiso a tu padre mañana mismo- dice Harry viendo la sonrisa del de ojos azules.

-No aceptes un no como respuesta-dice Louis viendo a Harry soltar una ligera risa.

-Oh, por favor. Tu padre me ha intimidado desde que vino temprano a tu casa y nos vio cenando, aunque tu madre no se queda atrás de personas que me detestan. Ya le pedí su bendición dos veces y para serte sincero, igual nos vamos a casar. No importa lo que diga- dice Harry viendo a Louis soltar una carcajada y el rizado le tapa la boca, el omega le da una mordida que hace al rizado alzar una ceja y con prisa ataca sus labios con varias risas de paso.

La tensión entre Harry y Louis podía notarse a miles de kilómetros, cuando el omega le entregaba unos papeles ambos se sonrojaban y se disculpaban cuando se les caía por los nervios o cuando esperaban para pedir una taza de café, miraban al suelo o a la pared hasta que la taza estuviera en sus manos e irse por dónde vinieron, o al menos hasta que el rizado se cansó de observar cómo acosador al omega y decidió que, si él no lo deseaba, iba a parar con su angustia o al menos un poco de ella.

Es por ello por lo que cuando Louis se dirigía a su oficina para entregarle unos papeles y hablarle sobre cómo se habían organizado, bueno, el rizado solo trataba amablemente al de ojos azules. Aunque todos pensarán que era porqué era el hijo del jefe, sin saber que Harry quería que se siente en su regazo para acariciar su cabello y darle besos en su mejilla mientras leía sus documentos.

El de ojos azules no puede evitar tener una mirada sorprendida en su rostro cuando antes de que pueda salir por la puerta escucha al rizado mencionar su nombre. -Louis, yo...bueno, me preguntaba si es que... Yo entiendo si no quieres, porque es un poco extraño, pero quisiera saber si quisieras ir un rato a....bueno...comer algo o a pasar el rato afuera luego de la oficina. - dice Harry con nerviosismo y observa al de ojos azules alzar una ceja, pero luego sonríe.

-Claro, Styles. No suena mal. Yo salgo a las siete y podríamos salir, si es que no te molesta esperarme- dice Louis mientras observaba al rizado negar con prisa. -Bien. Nos vemos, Styles- dice el de ojos azules para darse la vuelta y cerrar la puerta de la oficina.

Fue la primera vez de muchas que salían después del trabajo a comer algo. Al principio ambos se notaban un poco nerviosos, pero finalmente la conversación se hacía sola. Un día el de ojos azules lo invito a su casa para ver una película. El rizado no podía negar que estaba nervioso, pero lo tranquilizó el hecho de que los padres de Louis habían salido a celebrar una recaudación de la empresa e iban a venir muy tarde.

O al menos eso pensaban.

El de ojos azules observaba con asombro cada una de las escenas a pesar de ser quién eligió la película porque la había visto hace un tiempo. Mientras el rizado a su lado no podía evitar lanzarle miradas y soltar ligeras risas al ver como este se reía, enojaba o soltaba pequeñas lágrimas por la trama de la película.

El rizado agarraba la manta que tenían e intentaba que esta cubra el cuerpo de Louis completamente para que no sienta frío, además de que le paso una almohada para que pueda abrazar por los nervios de la película. Estaban tan concentrados en la película que no se dan cuenta que la puerta principal se abre rápidamente y se escuchan voces entrar por la puerta principal. Ambos jóvenes voltean con miedo a la puerta para observar a los padres de Louis mirarlos con cierta confusión.

-Styles- dice con confusión su padre, mientras observaba a su madre que estaba en las mismas condiciones.

-Sr. Tomlinson, Sra. Tomlinson.- dice el rizado intentando no sonar nervioso del todo.

-¿Estás son horas de quedarse en casa ajena sin avisar?- dice la madre del de ojos azules con cierto enojo al no ser ninguno de los dos avisados por su hijo.

-No. Por supuesto que no. Disculpe por ello.- dice el rizado levantándose con cuidado y ayuda al de ojos azules a levantarse también con la atenta mirada de los padres del menor. -Yo me voy retirando. Disculpen por la molestia- dice Harry mirando de reojo al de ojos azules que sonreía ligeramente y a pesar de que sus padres lo seguían observando. Louis camina junto al rizado hasta su auto.

-Algún día tendré mi propia casa- dice Louis viendo como el rizado alza una ceja.

-No te voy a dar un ascenso- dice Harry sonriendo, mientras Louis sonríe divertido.

-No necesito uno. La próxima sería mejor en tu casa. Me refiero en ver una película- dice Louis sonrojándose, pero con una sonrisa ligera de paso. El rizado suelta una risa asintiendo.

-Siempre eres invitado. Nos vemos mañana- dice el de ojos verdes dándole un rápido beso en los labios para entrar a su auto y dirigirse con una sonrisa hasta su casa, sabiendo perfectamente que dejaba a un joven sonriendo en su partida.

Louis estaba almorzando junto a sus padres, luego de pasar el día con el rizado, aunque también parte de la madrugada viendo las estrellas. Todos los viernes almorzaba con sus padres, pues estos decían que eligiera un día. El viernes, Harry trabajaba casi todo el día y no podía ni almorzar con él, entonces Louis había decidido que sería mejor el viernes.

Los almuerzos con sus padres dejaron de ser los mejores desde que Louis les había contado que estaba saliendo con el rizado. Cada cinco segundos mencionaba que los Feder iban a venir a la casa el domingo a saludarlos. El de ojos azules sabía cuáles eran las intenciones de sus padres, siempre eran las mismas.

Intentar convencerlo de salir con el hijo de los Fender, para luego contraer matrimonio. Era de lo único que hablaban, incluso en este momento que almorzaban en la casa estaban hablando de ello.

-Papá, ¿Fender no es algo mayor para casarse? - dice Louis, pues Sam era prácticamente el dueño de la empresa y debía tener cierta edad para eso, pero su padre sonríe, dejándolo algo confundido.

-Es menor que Styles- dice el Sr. Tomlinson, viendo como Louis abre sus ojos como platos y dejaba de hablar para seguir comiendo su almuerzo.

-Hijo, ya acordamos con los Fender. Además, estabas de acuerdo hace unos años- dice su madre mientras el omega hace una mueca.

-Tal vez si lo conoces un poco más, podrías intentarlo. Es dueño de una de las más grandes empresas de Inglaterra. - dice su padre con una leve sonrisa mientras miraba a su esposa que asentía.

-A ustedes solo les importa el dinero- dice Louis viendo como sus padres se miraban y se encogían de hombros como si fuera algo obvio. -Y por milésima vez les anuncio que estoy saliendo con Harry. Sí, de nuevo les estoy diciendo. Al parecer algo tan simple no se les queda.

-A palabras necias, oídos sordo, hijo mío- dice su padre mientras Louis alza una ceja, viendo a su madre asentir acordando lo que decía su padre.

-Que coincidencia, porque hablas y no escucho nada de lo que dices. Me voy a casar con Harry, papá. ¿O estás en esa etapa de la vejez? - dice Louis con sarcasmo venenoso en su voz, mientras terminaba de almorzar y se levantaba de su asiento para dejar el plato en la cocina y dirigirse a su habitación con prisa, o al menos hasta que pase la hora acordada y pueda irse junto al rizado.

Harry se había levantado temprano, tenía el anillo en sus manos, mientras observaba al de ojos azules dormir cómodamente en su cama. El rizado hace una mueca, mientras se coloca a su lado y pone el anillo en su dedo. Se levanta, con rapidez se ducha y comienza a buscar lo primero que encuentra para alistarse. Observa al de ojos azules mirarlo de reojo con una sonrisa. -Ya era hora- dice Louis mientras comienza a jugar con su anillo. -De las cinco propuestas que me has hecho, creo que esta es la mejor- dice el de ojos azules soltando una risa.

-Lo sé. Voy a ir a decirle a tu padre por última vez para pedirle su bendición para casarnos o lo que sea. - dice soltando un suspiro de frustración.

-¿Y si dice que no?- dice Louis viendo al rizado encogerse de hombros.

-Ya veremos- dice Harry mientras Louis asiente alzando una ceja. -Igual nos vamos a casar, aunque ninguno de tus padres esté, además puedo prestarte a los míos si deseas. Te adoran, demasiado, más que a mi creo. -dice Harry mientras el de ojos azules se encoge de hombros.

-Todos me adoran. Tengo un don- dice Louis encogiéndose de hombros para soltar un bostezo. -Haz lo que tengas que hacer. Buenas noches- dice Louis mientras vuelve a echarse en la cama y cerrar sus ojos.

El rizado soltaba un suspiro al observar la casa de sus queridos y amorosos suegros mientras estacionaba el auto lo más cerca posible, por si ambos deciden matarlo. Hoy era el día, no le importaba lo que sucediera. Hoy era el día. Se acerca hasta la puerta sacudiendo su jean negro rasgado y sacándose sus lentes de sol para colocarlos en su bolsillo; porque su camisa de cuello en V no iba a sostenerlos lo suficiente y se hacía un moño con su cabello. El rizado sabe la respuesta en cuanto el padre del de ojos azules abre la puerta y la madre de su omega miraba con disgusto su vestimenta desde las sombras, pero ya no le importaba.

-Si vas a hacer la misma pregunta, yo creo que ya sabes bien la respuesta- dice el padre de su omega, mientras el rizado sonríe asintiendo con la cabeza.

-Disculpe señor, pero yo no pienso pedirle permiso, yo le estoy avisando que me voy a casar con su hijo. He sido bastante amable con usted, porque deseaba que Louis tuviera a sus dos padres en su boda. Si usted decide venir a la boda sería lo ideal como padre, pero yo pienso tener una boda con su hijo, aunque usted no se presente. No importa si tenemos que gastarnos todos nuestros ahorros. Su hijo quiere una boda espectacular y eso es lo que yo pienso darle. Yo lo amo como él me ama a mí. Así que nos vemos en la boda quiera o no, porque me voy a casar con él de cualquier forma- dice Harry enojado mirando al padre de Louis cerrarle la puerta en la cara. El rizado rueda los ojos y comienza a caminar hasta su auto para dirigirse a su casa, dónde se encontraba el de ojos azules viendo una película.

-Wow, no creo que haya ido tan bien- dice Louis haciendo una mueca, mientras el alfa soltaba un suspiro y se sentaba a su lado.

-Me fue mejor de lo que piensas. Le dije algunas verdades en su cara. No creo que se lo haya tomado de la mejor forma-dice el rizado mientras el de ojos azules asentía y se levantaba del sofá, mientras apagaba la televisión.

-Bien. Ahora es mi turno. Vamos- dice Louis tomando con rapidez su mano para dirigirse al auto del rizado.

- ¿Me vas a hacer volver? - dice Harry asustado, mientras el de ojos azules sonríe.

-He olvidado mi vestido de bodas- dice Louis mientras el rizado abre sus ojos como platos. -Nos vamos a casar si o si, Styles- dice el omega mientras el alfa sonríe y agarra su mano para dirigirse al auto del de ojos azules. Estaban en el auto y el de ojos azules prende la radio y sonríe al escuchar la canción que tanto amaban, porque es su canción, o al menos lo fue en ese momento.

La primera vez que cruzaron una mirada fue en un bar de las afueras, ambos jóvenes habían decidido ir con sus mejores amigos. Mientras uno estaba pensando en planes para casarse y que sus padres dejen de molestarlo por alguna vez en su vida, otro estaba pensando en que lo mejor sería tener un ascenso más en su oficina, para que de esa forma pueda tener un mejor cargo en el futuro, porque su carrera era lo único importante en su vida.

No estaban seguros de que fue lo que lo había sucedido cuando ambos decidieron quedarse en la barra para pedir alguna primera bebida mientras sus amigos bailaban al compás de la música. El rizado estaba probando su bebida cuando siente a alguien sentarse a su lado sin previo aviso. No le toma mucha importancia, pero no puede evitar alzar una ceja y mirar de reojo al joven cuando comienza a hablar.

-Ya era hora que llegarás, cariño- dice la persona a su lado y el de ojos verdes voltea algo confuso para ver al joven a su lado y casi se atora con su bebida. El alfa observa los ojos azules que lo miraban igual de impresionados. El omega se sonroja y toma su bebida mirando al suelo con prisa. -Em...disculpa. Es solo que el barman estaba siendo algo molestoso y si pensaba que estaba con alguien se iba a alejar. - dice el omega sin mirarlo, mientras el rizado asiente.

-No te preocupes. Está todo bien. - dice el rizado sin dejar de observarlo con una pequeña sonrisa. El rizado tomaba su bebida sin dejar de observar al joven de ojos azules que intentaba esconder su sonrisa haciendo varias muecas. -Entonces, ¿viniste solo? ¿o con amigos? ¿o algo parecido? -pregunta el joven alfa mientras el de ojos azules dejaba su bebida y lo miraba alzando una ceja.

-Bueno, para que sepas vine con mis amigos, solo eso. Aunque es un poco extraño que me hayas preguntado eso antes que mi nombre, pero puedo aceptarlo si me dices el tuyo- dice el omega viendo al rizado sonreír con nerviosismo mientras sus mejillas se enrojecían.

-Soy Harry, un alfa soltero, sí- dice el rizado mientras sonríe nervioso y el de ojos azules suelta una carcajada que hace al rizado soltar un suspiro por lo bonito que se veía intentando ocultar su risa con su mano.

-Soy Louis, un omega soltero, sí- dice el omega mientras aprieta sus labios para no sonreír y Harry se humedece los labios asintiendo con las mejillas sonrojadas, para evitar sonreír, aunque es inevitable.

Su conversación fue interrumpida por una joven de cabello rubio que se acercó al chico de ojos azules mientras lo abrazaba por los hombros. -Hey, soy Taylor y veo que estás coqueteando con mi chico bonito. No te dejes intimidar por mí, solo que lo cuidamos como un nene, porque eso es lo que es. - dice la alfa mientras el rizado alza una ceja y Louis se sonrojaba. -Te estoy viendo, joven desconocido- dice la joven mientras se alejaba a la pista de baile. El rizado miraba a la rubia con el ceño fruncido al ser tan pegada al joven de ojos azules.

-Solo para que sepas, solo tengo 29-dice el alfa mientras comenzaba a tomar su bebida con nerviosismo. Bueno, no tenía 29, pero no podían culparlo si es que recién acaba de cumplir 32 años, así que solo son tres años. No podía afectar tanto. No quería verse tan viejo.

-Yo tengo 25, así que no creo que haya mucho problema- dice el de ojos azules mientras miraba a su alrededor intentando ocultar su nerviosismo. Bueno, no tenía 25, pero no podían culparlo si es que hace más de un mes cumplió 22 años, así que solo son tres años. No podía afectar tanto. No quería verse como un chiquillo.

En el caso de omega y alfa, la conexión era muy especial, no era inmediata, a veces no lo era. Aunque por alguna razón podías sentir algunas mariposas desconocidas jugando en tu estomago o podías quedarte viendo a esa persona que recién conoces por más tiempo del debido. No sabes muy bien que es, pues la persona al frente tuyo es preciosa, pero tal vez sea solo por eso y nada más.

En este caso, cuando el omega y alfa se besan sin saber que son destinados, puede sentirse, puede sentirse la chispa, puede sentirse esa sensación nunca sentida. De pronto te das cuenta de que todo es cierto, que todo ese tormento de emociones, esos fuegos artificiales que puedes sentir en todo tu cuerpo son reales. Los mitos y leyendas cuando encuentras a tu alma gemela son ciertos. Ambos lo comprueban cuando luego de tantas horas sintiendo que era el lugar correcto estar junto al otro, deciden juntar sus labios en un ligero beso que hace que sus almas floten en una sola.

El de ojos azules tocaba el timbre de la casa de sus padres junto a la mano del rizado que estaba más nervioso de lo que estaba cuando vino solo. El de ojos azules sonríe al ver a su madre que borra su sonrisa al verlo tomado de la mano del alfa. A lo lejos su padre se acercaba haciendo una mueca y antes de que pueda decir algo, el omega le hace un gesto con la mano, porque iba a hablar y nadie lo iba a detener.

-Padre, madre. Por si no lo saben tengo 25 años, no soy un chiquillo de 20 años. Llevo junto a Harry cuatro años, que es mucho más de lo que ustedes esperaron en casarse. Harry ha estado siendo muy dulce con ustedes en no casarnos aún para que ustedes dejen de actuar como niños y puedan acudir a la boda, pero al parecer ese no está siendo el caso. Harry fue el que decidió esperar a que ustedes recapaciten, porque si fuera por mi nos hubiéramos casado esa misma noche que nos conocimos. A pesar de todo, pueden ir a la boda si lo desean. Ahora si me permiten, voy a pasar y llevar el vestido a mi futura casa. - dice Louis mientras sus padres se miraban entre ellos y el de ojos azules entraba

-Yo...voy a esperar en el auto. -dice Harry con prisa mientras se dirigía hasta el auto y luego de unos minutos observa al de ojos azules acercarse junto a un bonito vestido, del que no quería seguir viendo detalle para no arruinar la sorpresa.

Louis se sube al asiento del copiloto soltando un suspiro, mientras el rizado volteaba a mirarlo con una sonrisa. -Creo que nunca estuve más enamorado- dice Harry mientras el de ojos azules se sonroja y sonríe.

-No, amor. Sabes que nunca estuviste más enamorado y digo lo mismo- dice Louis mientras volvía a mirar al frente, mientras el rizado comenzaba a conducir.

-Nunca vi a tus padres tan molestos. No, espera. Ya me acordé. - dice Harry mientras hace una mueca recordando como hace unos años había ido a la casa del omega para invitarlo a cenar.

Fue un gran espectáculo.

Eran las siete de la noche, una hora prudente, según el rizado, para llevar al omega de ojos azules a un bonito restaurante que recién había abierto hace unas semanas. No era lo suficientemente elegante para molestar al de ojos azules y tampoco suficientemente casual para pensar que no está siendo serio con sus propuestas de salir en las noches o cualquier momento para ser verdad.

Estaba vestido casual, lo mejor que podía al menos. Tenia un par de narcisos en sus manos y la camisa favorita del de ojos azules que era obviamente una que combinaba con sus ojos, o al menos eso dijo cuando la vio. En su auto tenía puesta la playlist favorita del omega con todas sus canciones favoritas y algunas que le parecieron lo más cursi que encontró. Sacude su cabeza al ver como la puerta se abre y observa a los dos alfas que Louis tenía por padres mirándolos con desprecio. Como siempre para ser sinceros.

-Hey, vengo por Louis. -dice Harry mientras la madre del omega rueda los ojos.

-Bueno, en estos momentos no se encuentra disponible, está teniendo una cena especial junto a los Feder. Sería mejor que te retires- dice el padre del omega mientras Harry observaba en la mesa del comedor al de ojos azules que sonreía emocionado al verlo.

-Sería lo mejor, Styles. Esto ya está acordado hace semanas, así que buena suerte.- dice la madre del omega mientras cerraba con una falsa sonrisa la puerta en su rostro. Mientras tanto, adentro del comedor el de ojos azules frunce su ceño al ver como sus padres le cerraban la puerta a su alfa.

-Padres, creo que me voy a retirar un segundo. Voy a buscar los bocadillos que acordamos, creo que los deje en el piso de arriba- dice Louis mientras sus padres se miraban sin saber que responder, pero sin previo aviso se levanta y comienza a caminar hasta su habitación. Observa como el rizado estaba esperándolo y rueda los ojos sonriendo. -Cada vez te vuelves más rápido en subir ventanas. Te felicito-dice Louis mientras agarraba los bocadillos que en serio estaban e su habitación para comenzar a comerlos.

-Hey, te voy a llevar a una cena y decides comer bocadillos. Me parece una falta de respeto a mi bolsillo-

-Te puedo invitar uno si deseas- dice Louis mientras le entregaba una pequeña dona de azúcar. El rizado alza una ceja y asiente mientras come la dona. El omega termina su dona y alza una ceja al ver al rizado sacar una servilleta de su bolsillo y limpiar su boca. -Que elegante- dice el de ojos azules mientras el rizado le entregaba otra servilleta.

-Vámonos antes de que nos maten, o peor, nos atrapen- dice Harry mientras el de ojos azules se aguanta una risa. Ambos trepan el árbol que estaba al lado de la ventana de Louis y se toman de la mano para comenzar a correr hasta el auto del de ojos verdes.

Fue una noche increíble, o al menos hasta que llegaron a la casa del de ojos azules que solo quería quedarse a dormir junto al rizado como lo hacía la mayoría del tiempo.

-Recuerdo que tu padre me grito como si hubiera cometido el peor pecado de todos. Nos grito horrible y en serio pensaba que cuando tu madre salió de la sala hecha una furia iba a sacar una escopeta. - dice Harry mientras el de ojos azules suelta una carcajada. -Igual a la primera vez que le pedí la bendición para casarnos. - dice Harry mientras soltaba un suspiro.

­‑Hubiera querido estar ahí. - dice Louis mientras el rizado rueda los ojos. -Si no me hubiera ido, estaríamos comprometidos con un lapso de tres horas más- dice Louis mientras el rizado sonríe.

-Eres muy cursi. - dice el de ojos verdes viendo a Louis mirarlo para luego sonreír mostrando sus bonitas arrugas al costado de sus ojos.

-No, tu lo eres. Bueno, ambos. - afirma el omega mientras recordaba el día que llegó a la casa del rizado con una bonita sorpresa de su parte.

El rizado estaba en su auto observando con nerviosismo la casa del omega de ojos azules. Sus amigos estaban en la parte trasera del auto y observaban expectantes su siguiente movimiento. Harry observaba en su mano la pequeña caja de color azul con una mueca en su rostro de total nerviosismo. Sin previo aviso sale del auto con una fuerza de voluntad que no creía que existía y toca la puerta sin darse cuenta de que el de ojos azules había salido por la puerta trasera hace unos minutos por un tonto pedido de sus padres.

Harry esperaba observar unos bonitos y alegres ojos azules, pero lo recibió unos ojos azules llenos de rabia y desprecio, bueno dos. El rizado no puede observar las muecas de sus amigos detrás suyo, lo cuál es bueno, porque sino estuviera huyendo hace varios segundos. -Buenos días, Sr. Tomlinson, Sra. Tomlinson. – dice Harry con nerviosismo. -¿Se encuentra Louis?- dice tragando saliva, mientras ambos alfas se miraban entre sí. La madre de Louis sonríe y siente un escalofrío.

-No se encuentra, se ha ido. Así que puedes irte, Styles. Si no vienes más creo que sería lo mejor, porque mi hijo ahora esta en una cita con Sam.- dice la mujer mientras el rizado alza una ceja y quiere decirle tantas cosas a la insoportable señora Jenny que no se pueden imaginar. Claro, no podía decirle Jenny o al padre de Louis no podía decirle Ronald, porque sabía que eso significaría que lo sacarán a patadas.

El rizado rueda los ojos al ver como su querido suegro cierra la puerta en su cara. Harry conoce muy bien a su omega y sabe perfectamente que seguro cayó en una trampa de sus padres, solo esperaba que donde quiera que esté lo llame lo más pronto posible.

Mientras tanto, cuando Louis llega a la tienda, hace una mueca al observar quién se encontraba justamente donde padres les había pedido ir. El de ojos azules intenta pasar desapercibido, lo cual no logra, porque el joven rubio se acerca con prisa hasta donde se encontraba. Una maldita emboscada, lo que faltaba. Louis no quiere perder el tiempo, así que lo que tiene que decir lo dice sin pensarlo dos veces.

-Estoy enamorado de Harry. Siempre lo voy a estar, porque no si es su forma de tratarme, su forma de sonreír, la forma en que sus ojos brillan al verme o si es simplemente sus tontos chistes, pero cada cosa que hace para mi es lo mejor que mis ojos pueden apreciar. Así que será mejor que me dejes en paz, porque no voy a soportar que hables así de él y menos que pienses que lo voy a dejar por ti. - dice Louis mientras Sam asiente con la cabeza.

-Creo que soy bastante insoportable por buscar la aprobación de mis padres. Son una linda pareja, Louis. Lamento mucho molestar con ello, eso es lo que venía a decirte para ser sincero- dice Sam mientras el de ojos azules alza una ceja y lo observa alejarse.

-Es lo más lindo que me has dicho y no me lo dijiste a mi- dice Harry detrás suyo, obviamente asustándolo

- ¿De qué andas ahora? ¿De espía o tienes algún superpoder que no sepa? -dice Louis soltando un gran suspiro por el susto que le había dado.

-Estaba yendo a tu casa y tus padres me dijeron que tenias una cita con Sam, aunque más que cita fue una charla de cinco segundos diciendo que soy el amor de tu vida. La mejor cita de todas. - dice Harry sonriendo mientras Louis se sonroja y rueda los ojos.

-Lo dice él que no puede aguantar ni dos segundos lejos de mi al parecer. Nos vimos en la mañana. ¿Sucede algo o solo quieres verme más tiempo? - dice el de ojos azules sonriente.

-No pensaba hacerlo aquí para ser sincero, quería que fuera más romántico, pero no quiero esperar ni un segundo más. Quiero que me quieras fuerte, tan fuerte que nuestro amor sea escuchado por Dios y el Diablo. Deseo esparcir rumores de nuestra relación, que sepan que somos almas gemelas y que nos amamos tanto que este escrito en los libros. Quiero que seamos leyendas sobre nuestro amor, que hablen de cuanto nos amamos, y sé que somos personas completamente normales sin algún requisito en la vida más que terminar la carrera o vivir en una casa con cachorros corriendo...-dice Harry mientras observa la sonrisa del de ojos azules. -... pero quisiera hacer todas esas cosas contigo, porque para mí esas cosas son leyendas y deberían estar escritas en un libro, en nuestro libro. Quiero hacer todas esas cosas cursis de películas, que nunca pensé que iba a querer hasta la primera que te vi. Quiero ser tan cursi con cada palabra que digo que las personas quieran vomitar al vernos. Quiero ser tu último amor hasta el fin de nuestra existencia y si tenemos otra vida, pienso buscarte en ella. Es por eso por lo que voy a dejar de hablar tanto e iré al punto, porque si no nunca vas a llevar este bonito anillo en tu dedo. - dice Harry mientras sacaba su caja azulada.

-A mí también me encantaría hacer todas esas cursilerías contigo, Harry, pero no sería justo que solo yo llevará un bonito anillo- dice el omega mientras sacaba con una sonrisa una pequeña caja de color verde, donde mostraba un anillo azul. -Definitivamente estamos conectados. Ahora ambos tenemos un anillo y vamos a casarnos- dice Louis mientras el rizado suelta una risa y toma sus mejillas para acercar sus labios y sentir como cada palabra que había dicho se cumpliría al pie de la letra, porque estaba escrito en el libro de las leyendas, en el libro de los amores perfectos, ahí estaba escrito.

Louis se encontraba mirándose al espejo mientras observaba el vestido que había elegido. Harry le había prometido la mejor boda del mundo, pero no quiso que todo quede en sus hombros. Tal vez sus padres le habían cortado el dinero de su cuenta bancaria, tal vez solo tenia su pequeña alcancilla en la parte superior de su mesa de noche con la mayor cantidad de billetes que podría tener, en vez de pedir regalos de cumpleaños, pedía dinero, vendió todas las joyas que le habían regalado, los trajes caros y su trabajo como empleado en la empresa de su padre, o al menos hasta que se hartó que decidiera poner a Sam a su lado para los papeles.

Harry decía que no le importaba, pero podía ver en su rostro la mueca disgustada cada vez que Sam se colocaba a su lado. Siempre le decía que estaba bien, que sabia perfectamente que ellos estaban juntos, pero lo entendía, porque se sentiría igual si es que fuera en otra posición. El día que había ido a la oficina de su padre para renunciar, este sabe perfectamente las palabras que van a salir de su boca y por ello Ronald le dice que iba a mover a Sam a otra área.

Louis no era fanático de los vestidos o trajes apretados en la cintura, pero al ver como Harry sonreía cada vez que lo observaba, porque le gustaba tocar su pancita varias veces, decidió que su vestido y traje para la fiesta deben ser de esa forma. Porque a pesar de que no era su vestimenta favorita, esa pequeña acción hacia su corazón derretirse de amor.

Es por eso que cuando ambos se agarran de las manos y dicen el sí para pasar el resto de sus vidas juntos, saben que no hay vuelta atrás y no podian estar más feliz por ello. Cuando pasan a la pista de baile, ambos con un traje conjunto de color blanco para el último baile de pareja de la noche, con todos los ojos observandolos. El rizado no puede evitar alzar una ceja mientras Louis se encoge de hombros y escuchaba la canción que habían colocado. Sabía que no hubiera sido la primera opción de Harry, pero no había duda que era la canción correcta.

Saturday mornin', jumped out of bed

And put on my best suit

Got in my car and raced like a jet

All the way to you

Knocked on your door with heart in my hand

To ask you a question

'Cause I know that you're an old fashioned man

-Tu quieres que nos maten. - dice Harry mientras Louis comienza a mover su cabeza al ritmo de la música y el alfa comenzó a cantar la canción con algunos cambios para nada sutiles.

Can I have your son for the rest of my life?

Say yes, say yes, 'cause I need to know

You say I'll never get your blessin' 'til the day I die

"Tough luck, my friend, but the answer is no"

Louis suelta una risa mientras las personas a su alrededor los observaban bailar con cierta confusión y el de ojos azules decide no quedarse atrás, mientras cantaba junto al rizado.

Why you gotta be so rude?

Don't you know I'm human too?

Why you gotta be so rude?

I'm gonna marry him anyway

(Marry that boy) marry him anyway

(Marry that boy) yeah, no matter what you say

(Marry that boy) and we'll be a family

Why you gotta be so rude?

Ambos bailaban con la canción y cantaban con más fuerza, mientras se reían, a pesar de que todo el mundo sonreía con cierta confusión. Lo que no sabían era que los padres de Louis se habían mirado entre ellos y sonrieron para comenzar a moverse al ritmo de la canción lentamente y cantar junto a ellos.

Los padres de Louis observan a su hijo reírse a carcajadas y recuerdan la pregunta que el rizado les había hecho por total cortesía, hace varios años atrás.

¿Puedo tener a su hijo por el resto de mi vida?

Bueno, luego de todo lo que les hicieron pasar y luego viéndolos bailar en su boda. No importaba lo que ellos quisiesen, porque sabían perfectamente que no podían ir en contra de la felicidad de su hijo. Así que, si tuvieran que responder esa pregunta, ahora, a estas alturas, tendría que ser un simple....

Sí, puedes, porque no hay nada que pueda separar en lo debe ir escrito en el libro de los grandes amores.

HEY ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO ♥️

Bueno ay

Luego de tantas emociones aquí vienen más p xd ya me tranquilice un poco bc pausa xd

Manifestando selfie de louis 🕯🕯🕯

Bueno, como decía espero que les haya gustado este corto os <3 voten y comenten pls

Que la vida les sonría,

Dani :3