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EX’S AND OH’S (ls)

Summary

Donde Louis es un omega que manda un mensaje de voz a sus ex novios sin darse cuenta del error que ha cometido. Ninguno de sus ex novios lo ha superado, pues afirmaban que eran sus alfas y desean conquistarlo de vuelta al haber tres vacantes nuevas para profesores en la universidad a la que enseña, recordando perfectamente que sus únicos ex novios eran los trillizos Styles. Sin contar que tenía un hijo de 6 años que nunca había conocido a su padre.

Genre:
Romance / Humor
Author:
Dani
Status:
Complete
Chapters:
1
Rating:
n/a
Age Rating:
18+

UNICA PARTE

El de ojos azules estaba agotado, demasiado agotado, había demasiados exámenes que corregir y demasiados trabajos para entregar. No podía leer algún exámen de normas de leyes de nuevo. No podía volver a leerlo. Observa su reloj y con prisa sale de la sala de profesores, después de despedirse de su mejor amiga, Perrie.


El joven de 24 años estaba buscando su clase de siempre, pero algo le llamó la atención en la entrada de la universidad. El de ojos azules observa confuso como todo el mundo observaba con curiosidad a la persona que entraba por la puerta principal. No podía ver adecuadamente al estar rodeado de personas, pero en cuánto decide quedarse en su lugar, espera a que se acerquen y poder observar como pasaban a su lado.


El de ojos azules abre los ojos como platos al observar su pesadilla en frente de él. Louis observa a los trillizos que tanto evitaba encontrarse de nuevo, en la universidad que estaba enseñando. No podía ser cierto, en serio que no podía ser cierto. Louis observa al joven rizado de grandes gafas que lo mimo por tantos meses hasta asfixiarlo de amor y a su lado se encontraba un joven tatuado con una casaca de cuero y cabello alborotado que vivió grandes aventuras a su lado, que nunca pensó que haría y por último encontró a su mejor amigo de la infancia que no podía remediar sus sentimientos el uno al otro y sin duda la ruptura más dolorosa que tuvo que hacer.


Tenía que correr lo más rápido que sus piernas le permitirán y eso hizo. Louis comenzó a correr en dirección contraria a dónde ellos se encontraban y comenzó a buscar por todos lados a su mejor amiga que estaba en la sala de profesores leyendo una revista de moda. -Hey, ¿Por qué estás aquí tan temprano?- dice la joven confundida mientras Louis tragaba saliva.


-¿¡Tú los llamaste!?- dice Louis alterado, mientras su amiga alzaba una ceja.


-No sé de que me hablas- dice la joven mientras lo miraba confundida sin dejar de pasar las hojas de su revista.


-¡Diablos, Perrie! ¡Están aquí! ¡Los tres! !No puedo! ¡Es simplemente demasiado! ¡No puedo con los tres y sus preguntas de porque los dejé! ¡No puedo! ¿¡Por qué no me desmayó aún!?-dice Louis alterado mientras Perrie cerraba su revista y se levantaba para tomar sus hombros. -¿¡Por qué me dejaste que viniera aquí!? ¡Está es la sala de profesores! Van a venir si o si- dice Louis alterado, mientras su amiga se acercaba con prisa a la puerta.


-Será mejor que saques una varita mágica, comiences a decir leviosa y flotes a otra galaxia, porque se están acercando- dice Perrie mientras Louis comenzó a ver por todos lados y encontró la manta de su mejor amiga que la utilizaba cuando estaba de verás cansada. El de ojos azules se envuelve con la manta y se queda en una de las esquinas junto a la cantidad de papeles y archivos para al menos tener algo de protección.


-No puedo creer que estés haciendo esto- dice Perrie soltando una risa mientras comenzaba a ordenar más archivos y arreglar la manta del joven para no ser revista.


-Sigue leyendo tu revista- dice Louis a través de la manta celeste de su amiga, mientras la puerta era abierta.


-Buenos días- dice la voz del director mientras su amiga Perrie y algunos otros profesores que estaban cerca se giraban a mirarlo para saludarlo. -Como bien sabes, el profesor Smith y su esposa se mudaron hace unos días y el profesor Adams renunció por problemas personales. Por ello, les presentó a los nuevos profesores, graduados de esta misma universidad. Tenemos a los profesores Styles. El joven Edward Styles, se dedicará a el curso de Derecho Penal II y III. Luego, tenemos a el joven Marcel Styles para el curso de Derecho Civil II y III. Finalmente, tenemos al joven Harry Styles que se dedicará a las clases de Derecho Constitucional I y II- dice el director de la facultad mientras terminaba de leer su lista. -Bueno, la joven Edwards le puede decir su horario y el joven Tomlinson puede ayudarlos como profesor secundario, pues aún está en su último año de carrera. ¿Sabe dónde se encuentra?- dice el director viendo a Perrie negar con la cabeza.


-No sé. A veces parece que está en otra galaxia- dice Perrie sonriendo para evitar soltar una carcajada, mientras Louis estaba abrazando más fuerte sus piernas para que se vayan de una vez.


-Bien. Espero que su estadía sea agradable. Nos vemos y si hay algún inconveniente me puede avisar- dice el director saliendo de la oficina de profesores, mientras los tres jóvenes observaban con curiosidad la sala.


-Bueno, yo tengo algunas cosas que hacer aún, pero con gusto Jade puede acompañarlas. Ella es mi novia, así que agradecería que no le coqueteen- dice la joven soltando una risa.


-No te preocupes- dice Marcel con prisa.


-Nosotros ya tenemos...bueno..- dice Harry haciendo una mueca mirando a sus hermanos.


-Sí...no te preocupes por eso- dice Edward bajando su mirada avergonzado, al igual que sus hermanos.


-¿Ya tienen omega?-dice la joven sonriendo divertida.


-En eso estamos- dicen los trillizos al mismo tiempo y Perrie asentía sonriendo, mientras Jade se scercaba a su lado.


-Hey. Mi nombre es Jade y con gusto les enseñó dónde están sus clases- dice la joven omega mientras Perrie hace una mueca.


-¿Saben que? Sería un gusto acompañarlos también, solo denme un minuto- dice Perrie mientras los tres jóvenes rizados salían primero junto a la joven omega.


-No puedo respirar- dice Louis sacándose la manta de encima.


-Ahora vas a oler a mi. Me van a matar tus alfas- dice Perrie cruzandose de brazos mientras Louis soltaba un gran suspiro.


-Tengo todo controlado. Ahora si fueras tan amable en salir. Necesito corregir algunas cosas de clase- dice Louis mientras la joven soltaba una risa y asentía para salir de la sala.


Pasan varios minutos y Louis estaba tan asustado de salir que sigue viendo los mismos exámenes una segunda vez, hasta que recibe la llamada de la profesora en la escuela de su hijo, pues se había hecho una pequeña herida en la cabeza, podía ir con él si lo desea, pero que no era nada grave. El de ojos azules comienza a correr a pesar de escuchar una voz conocida a sus espaldas y cuando esta ya no se hace escuchar guarda su celular y suelta un gran suspiro para luego sentir como chocaba con un cuerpo mucho más alto que el suyo.


El de ojos azules alza su mirada avergonzado, pero palicede al ver quién era. Un joven rizado con una mirada de preocupación, mejillas sonrojadas tomaba sus hombros para que se estabilice.


-Hola, Louis- dice el joven con timidez y colocaba sus manos en su espalda, mientras Louis suelta un gran suspiro y sonríe levemente.


-Hola, Marcel- dice Louis mirando al suelo, mientras esperaba que la muerte llegará por él y el joven rizado lo observaba a través de sus gafas con nerviosismo.


Un Louis con el semblante calmado se encontraba filmando un documental para su proyecto de leyes. Estaba tan concentrado en anotar todo lo que tenía en su libreta que no se dio cuenta que un joven de ojos verdes estaba a su lado queriendo preguntarle algo.


-Hey- dice el joven de gafas a su lado, mientras el de ojos azules voltea a mirarlo con timidez.


-Disculpa. ¿Qué necesitas?- dice Louis acomodando sus lentes.


-Solo quería saber si me puedes prestar tu cámara unos minutos. La necesito urgentemente para tomar unas fotos. Uno de mis hermanos la botó al suelo sin darse cuenta.-


-Wow, pero tenías todo en tu laptop, ¿no?- dice Louis con cierta preocupación.


-Claro. Me gusta ser precavido- dice el joven mientras Louis asentía sonriendo. -Eres...eres Louis, ¿no?- dice el joven sonrojado mientras Louis alzaba una ceja.


-Bueno, sí. Oh, espera. ¡Eres Marcel! Eres el joven que siempre intenta ganarle a la presumida de Perrie- dice Louis mientras sonríe divertido.


-No es presumida. No mucho. Es que en su clase se encuentra la chica que le gusta y adora impresionarla. A veces ser presumido es bueno- dice Marcel jugando con sus manos en su regazo.


-Eso tiene sentido. Aunque ella tiene una excusa para ser presumida. Al parecer te atrapé, porque tú no tienes ninguna, ¿o si?- dice Louis mientras Marcel se sonrojaba fuertemente sonriendo con timidez.


-No es mi culpa saber muchas cosas- dice Marcel mientras el de ojos azules suelta una risa. Louis pausaba su video y le prestaba la cámara al de ojos verdes.


-Disculpa, Louis. ¿Me estuviste filmando todo este tiempo?- dice Marcel un poco sonrojado, mientras Louis lo mira confuso agrrando la cámara, observa que mostraba un banco y al rizado leer y apuntar en su libreta.


-Diablos, disculpa. Lo voy a borrar inmediatamente. A veces me olvido que esta prendida cuando decido apuntar en mi cuaderno- dice Louis avergonzado mientras Marcel sonreía.


-No te preocupes. Yo también pienso que eres muy bonito-dice Marcel sonriendo, mientras Louis alza una ceja, pero sonríe con timidez.


-Gracias- dice Louis sonrojado y sin darse cuenta comienzan a hablar y reír hasta que sus horas libres acaban, pero prometen verse en otra ocasión, lo cuál cumplen.


Fue uno de sus más tiernos noviazgos.


-Disculpa por chocarte. Es que estoy apresurado- dice Louis mientras Marcel asiente.


-Claro, no te preocupes. Aunque si tienes algo de tiempo, podríamos hablar un poco. ¿Te parece?- dice Marcel con una dulce sonrisa que hiptoniza al de ojos azules, pues aprieta fuertemente sus labios y asiente. -¡Bien! Por cierto, tus amigas Perrie y Jade son muy lindas. No tanto como el dulce omega que eres tú, pero lindas. Lamento no traerte una flor como siempre lo hacía, pero tal vez lo vuelva a hacer porque como te dije la primera vez. Eres muy bonito, lo sigues siendo-dice Marcel sonrojado y sonríe hacia el de ojos azules que soltaba una tímida risa.


-Gracias, Marcel. Tengo que seguir corriendo- dice Louis mientras Marcel asiente. -Nos vemos luego- dice Louis mientras se despide del de ojos verdes y suelta un gran suspiro cuando cruza la puerta para caminar hasta la escuela de su hijo que estaba en la enfermería con los brazos cruzados.


-¡Hey, bichito!-dice Louis con una sonrisa divertida.


-No soy un bicho, papá. ¡Soy spiderman!- dice el joven mientras la señora de la enfermería le colocaba un poco de crema en su herida.


-No es nada grave, pero que no se lo toque por si le sale un moretón, sería mejor que se coloque una crema en su herida- dice la señora mientras hacía una pequeña lista de recomendación. -Aparte que ha comido mucho en el almuerzo y eso le ha revuelto el estómago. Ha vomitado varias veces, pero insiste en los dulces- dice la señora mientras Louis alza una ceja mirando a su pequeño hijo de ojos azules como los de él.


-Esta bien. Lo tendremos en cuenta. Como eres desesperante, mi niño, tendré que llevarte a la guardería de la Universidad, me tomaste desprevenido- dice Louis mientras su hijo daba varios brincos de emoción, mientras ambos salían de la escuela. -No te emociones mucho. Tengo en mis manos el documento de la señora Nelson sobre que no debes comer ninguna golosina. Así que las caritas de perrito abandonado que haces no van a funcionar, Alexander- dice Louis mientras su hijo rizado hace una mueca de enojo.


-¡Soy Alex!- dice el pequeño niño, mientras Louis suelta una risa tomando la mano de su hijo comenzando a caminar hasta la guardería en la entrada de la universidad y una joven rubia lo recibe con una sonrisa.


-Buenos días, joven. ¿Desea quedarse un poco con él o...- decía la joven amablemente, mientras el de ojos azules observaba su celular con miedo.


-Wow, no me di cuenta de que tengo una clase ahora. No se preocupe. Lo vengo a recoger a la hora que salgo- dice Louis mientras la joven asentía y el de ojos azules se despedía con un beso en la frente al menor y comenzaba a caminar con prisa a su siguiente, mientras su hijo se despedía con la mano.


Louis comienza a caminar con rapidez por los pasillos y saca de su bolsillo la siguiente clase que le toca, sinceramente solo se enfoca en el salón que era el que estaba al frente. El de ojos azules abre la puerta con timidez y agradece que los jóvenes conversaban entre sí mientras se dirigía hasta el profesor principal.


Quería morir, en serio.


Adelante suyo se encontraba un joven rizado con varios piercings y una mirada seria en su rostro al observarlo sonrojado. -Buenos días, Louis.- dice Edward mirando al sonrojado joven.


-Buenos días, Edward- dice Louis mientras suelta un gran suspiro nervioso.


Un Louis de cabello alborotado se encontraba muy nervioso mientras intentaba resolver algunos últimos datos de la última entrega para su trabajo. El joven estaba caminando mientras intentaba anotar todo lo importante de la clase, mientras caminaba para no perder tiempo. Lamentablemente, el joven se tropieza y deja caer sus apuntes al suelo, pero observa como un joven de rizos y casaca de cuero lo ayudaba a recolectar sus papeles tirados, hasta entregárselos en su mano y ayudarlo a levantarse.


-Muchas gracias. Eres Edward, ¿no? Estás en una clase conmigo-dice Louis intentando ser amable.


-Que considerado de tu parte recordarme. No te preocupes, yo también se perfectamente quién eres, Louis. Te sientas atrás de la clase con unas mejillas sonrojadas cuando vas a dormir- dice Edward mientras el de ojos azules se sonroja con fuerza. -También me siento atrás. Es divertido, tal vez demasiado- dice el joven con seriedad, mientras Louis alza una ceja algo confundido.


-Está bien. No te preocupes. Yo debo ir yendo a la clase- dice Louis mientras el joven alzaba una ceja.


-¿Tan temprano? Justo a esta hora es cuando se comienzan a pelear en la cafetería. Deberías ir a verlo. Aún queda media hora.- dice Edward mientras Louis apretaba los libros contra su pecho.


-Yo no lo sé...- decía mirand la pequeña sonrisa del de ojos verdes. -Bueno, esta bien- dice Louis mientras Edward caminaba a su lado contándole todas las anécdotas y aventuras de las que se perdía por simplemente entrar temprano a clases.


Fue el noviazgo más divertido que pudo tener.


-Tomlinson, los alumnos están en un trabajo de parejas en este momento. Agradezco que haya llegado.- dice Edward mientras Louis asentía con la cabeza y colocaba sus manos en sus bolsillos.


-Claro, disculpe por la tardanza- dice Louis tragando saliva con nerviosismo.


-Si me puede poner un poco al tanto sobre lo que el Profesor Adams estaba desarrollando en las clases sería de mucha ayuda- dice Edward mientras el de ojos azules asentía.


-Estamos viendo el capítulo 3 del libro. Específicamente las normas de conducta, para luego pasar al derecho penal sustantivo- dice Louis mientras el rizado asiente.


-No creeas que solo vine por el trabajo, Louis. Necesitamos hablar- dice Edward mientras comienza a revisar las hojas del libro hasta el capítulo 3.


-Sí, claro, pero creo que sería mejor en otro momento donde no haya ojos observando- dice Louis viendo de reojo a algunos alumnos que andaban de chismosos.


-Como desees, Louis. Solo recuerda que el público no es algo que me moleste. Creo que lo recuerdas bien- dice Edward mientras Louis se sonroja fuertemente.


-Estoy muy cerca en decidir si debo salir corriendo de esta sala, si no dejas de hablar tonterías- dice Louis mientras el joven rizado sonríe divertido, pero finalmente asiente y el de ojos azules se acercaba a unos jóvenes que le pedían ayuda.


Cuando Edward da finalizada la clase, Louis sale por la puerta lo más rápido que puede y busca con prisa a su mejor amiga que estaba conversando animadamente con su novia.


-Lamento mucho siempre entrometerme, pero necesito que me oculten- dice Louis mientras las dos jóvenes se miraban y asentían poniéndose adelante del joven que se escondía al lado de la pared. Estaba agachado y observa unas botas negras acercarse con prisa y traga saliva.


-Hey, Perrie.- dice la voz de Edward. -Cuando Louis decida salir detrás suyo, que venga a vernos. Solo queremos hablar. Que sepa que esconderse no es una opción. Además, Harry se dio cuenta perfectamente que estaba oculto en la manta celeste. La próxima agrecederíamos para el bien de nuestros alfas que sea una manta sin olor.- dice Edward, mientras unos zapatos elegantes se hicieron presentes en cámara lenta.


-Díganle que podemos olerlo claramente y por eso no sirve ocultarse. Harry desea verlo también, sobretodo él- dice Marcel mientras sus amigas asentían y ambos jóvenes se alejaban con calma. Perrie rueda los ojos y ayuda a Louis a levantarse.


-Solo debes elegir a uno-dice Perrie confundida, mientras Louis suelta una risa sarcástica.


-No, Perrie. No solo puedo elegir a uno. ¡Son trillizos! ¿¡No te acuerdas las primeras clases que tomamos!? Si son alfas u omegas, ya sean gemelos o trillizos, su compañero debe aceptar a todos.- dice Louis mientras Perrie alza ambas cejas con asombro.


-Wow, entonces no era solo un mito- dice Perrie mientras Louis suelta un gran suspiro. -Pero te gustan y tu les gustas a ellos.


-Son demasiadas responsabilidades, tengo que pasar tiempo con cada uno para satisfacerme a mi y a sus alfas, es demasiado para un omega que ya tiene un hijo-dice Louis con nerviosismo.


-Su hijo- dice Perrie mientras Louis suelta otro gran suspiro. -Tienes miedo. Lo entiendo.- dice Perrie viendo como Louis suelta un suspiro.


-Toda mi vida e intentado hacer a todos felices. Lo intenté en su momento. Nunca salí con los tres al mismo tiempo. Me sentí culpable en salir inmediatamente con su otro hermano. Imagínate si salgo con los tres al mismo tiempo. Yo sé que ellos así lo quisieron, pero no sé- dice Louis mientras Perrie hace una mueca.


-¿Lo hablaste con ellos?- dice la joven viendo como Louis bajaba su mirada avergonzado. -Louis, ellos son tus alfas y te van a perdonar al huir sin explicación. Te van a perdonar si es que recién les presentas a su hijo, pero si no lo hablas con ellos, les va a doler, porque ellos te consideran su omega-dice la joven alfa mientras Louis aprieta fuertemente sus labios.


-Lo voy a pensar, necesito hablarlo con Alex también. Necesito unos días-dice Louis mientras la joven alfa asiente y toma la mano de su pareja para seguir caminando a la cafetería, no sin antes despedirse del joven de ojos azules que se quedaba pensativo unos segundos, cuando siente una mirada a la lejanía y sube su vista para ver como un joven rizado observaba nuevamente a su libro con una pequeña sonrisa en sus labios.


El de ojos azules sonríe también mientras fingía leer sus cuadernos hasta escuchar unos pasos acercarse a su lado y apoyarse junto a él. Sin darse cuenta agarra con una mano su libro, comienza a leerlo, dejando su otra mano libre apoyada en la pared y se sonroja fuertemente con una pequeña sonrisa en su rostro al sentir como la mano de la persona de al lado se entrelazaba con la de él.


-Buenos días, Louis. Es un gusto verte- dice el rizado a su lado sin dejar de observar el libro que leía.


-Buenos días, Harry. Es un gusto verte igualmente- dice Louis finalmente.


Louis y Harry se conocieron desde los cinco años, fue algo típico en que Louis estaba jugando con su carrito y muñecos en el recreo hasta que se va un segundo a tomar agua, cuando vuelve observa a un niño rizado jugar con sus juguetes y le enfurece, el niño rizado se diculpa con prisa para comenzar a enseñarle sus juguetes también y así jugar juntos en lo que restaba del tiempo.


La primera vez que Harry y Louis se hicieron novios fue cuando eran unos pequeños jóvenes de 14 y 15 años, les gustaba tomarse de la mano en los pasillos y acurrucarse el uno con el otro.


El recuerdo más bonito que tienen juntos es cuando Harry cumplió 18 años y Louis le había organizado una increíble fiesta, aunque el de ojos verdes estaba más feliz de ver a su omega con un adorable gorrito de fiesta y varias serpentinas caer por sus hombros, mucho más emocionado que él.


Louis amo cada segundo a su lado.


-Necesitó mi otra mano para pasar de página- dice Harry mientras Louis se separa con prisa. -Te estás volviendo un poco más lento en la lectura- dice el rizado mientras Louis cerraba su libro.


-No he tenido mucho tiempo aparte de leer las normas penales- dice Louis mientras el rizado asentía.


-Seguro mis hermanos te han visto y en serio necesitamos hablar contigo- dice Harry mientras Louis voltea a mirarlo con nerviosismo.


-Lo sé, pero no sé si estoy listo para hablarlo con los tres juntos-dice Louis mientras Harry alzaba una ceja.


-Pero tenemos que hablar todos juntos sobre eso. Necesitamos una explicación. Nos la merecemos- dice el rizado a su lado.


-Lo sé y lo lamento. Necesito pensar bien un poco y mañana, mañana podré hablar mejor- dice Louis viendo al rizado asentir.


-Está bien. Te extrañamos mucho, Louis. Solo, no olvides eso- dice Harry mientras apretaba fuertemente sus labios y comenzaba a alejarse por los pasillos.


Cuando su última clase acaba, el de ojos azules agradece más de lo normal al tiempo y camina hasta la guardería para recoger a su pequeño hijo, sin darse cuenta que tres alfas se encontraban mirándolo confundidos, o no es hasta que los ve acercarse dónde empieza el pánico.


-Él es mi sobrino-dice Louis mirando a los tres alfas que lo miraban confundidos, pues el pequeño niño era una copia de los tres en miniatura.


-¡Papá! ¿Soy adoptado?- dice el pequeño chico preocupado mirando a su padre que apretaba con fuerza sus labios y se agachaba a mirarlo.


-No, no eres adoptado- dice Louis mientras Alex sonríe y luego observa con curiosidad a los tres jóvenes iguales.


-¿Cuál de ustedes es mi papá?- dice Alex emocionado mientras Louis quería matarse.


-Debemos irnos.- dice Louis soltando un gran suspiro, mientras su hijo suelta un brinco emocionado y comienza a correr con su padre hasta su auto.


-No digas nada. No preguntes nada aún. Mañana te tranquilizas y nada de preguntas si es que deseas chocolates en la cena- dice Louis poniéndole el cinturón a su hijo con rapidez, mientras su hijo asiente con alegría.


-Entonces, ¿Cuál de ellos es mi papá?-dice Alex mientras Louis suelta un suspiro sentándose en el asiento delantero.


-Para serte sincero, no creo que quieras saberlo- susurra Louis sin ser escuchado por su hijo que pintaba en la ventana con su dedo. El de ojos azules suelta un gran suspiro y no sabe si agradecer o maldecir al observar a Perrie mirarlo por la ventana.


-Creo que es hora de que hables con ellos- dice Perrie mientras Louis asiente con nerviosismo, pues no podía dejarlos con esa duda.


-¿Crees que no lo sé? ¿Crees que no sé que siguen parados en la puerta esperando a que vuelva? ¿Crees que no conozco a mis alfas? Demonios, tres, son tres alfas- dice Louis mientras Perrie lo sacaba rápidamente del auto.


-Respira y todo irá bien. Solo piensa en que al menos no son cuatro- dice Perrie mientras Louis suelta una risa asintiendo.


-Diablos, en serio hay gente que tiene cuatro- dice asombrado el de ojos azules, mientras Perrie alza una ceja. -Necesito que lleves a Alex a tu casa. Yo puedo pasar mañana o más tarde, te avisaré- dice Louis mientras la joven asentía.


El de ojos azules comienza a caminar con nerviosismo hasta donde los tres alfas se encontraban mirándolo atentamente. -Hey- dice Louis mientras los trillizos sonríe levemente.


-Hey- dicen los tres al mismo tiempo.


-Bueno...en primer lugar me fui porque lo de tener tres compañeros si son trillizos pensaba que era solo un mito o mejor dicho pensaba que no podía ser cierto. ¡Me aterré de solo pensarlo! Lamento no hablarlo con ustedes. ¡Era un chiquillo! En segundo lugar, el pequeño niño que vieron se llama Alexander y sí ¿bien? Es su hijo. Yo me enteré de mi embarazo cuando ya estaba en el otro mundo y me daba mucha vergüenza regresar porque habían pasado más de unos meses. Solo eso tengo- dice Louis mirando al suelo mientras los tres alfas se observaba entre sí y el de ojos azules solo quería saber como podían comunicarse solo con verse.


-Está bien, Louis. Más bien, queremos hablarte de otra cosa también. Es imporante- dice Marcel mientras Louis asentía confundido.


-Tenemos que ser sinceros contigo, Louis. Tal vez nos veas a nosotros tres ahora, pero la verdad es que somos quintillizos- dice Harry mirándolo con seriedad y el de ojos azules abre sus ojos como platos, sintiendo vacío todo el cuerpo.


-¿Qué?- dice Louis asustado mientras los alfas lo miraban preocupado.


-Sí. Bueno, somos Edward, Harry, Marcel, Drake y Josh- dice Edward mientras Louis se agarra el pecho nervioso, pero luego los mira con confusión.


-Están jugando conmigo- dice Louis soltando un suspiro mientras se sonroja con fuerza, los trillizos sueltan varias carcajadas y para ser sincero puede escuchar las carcajadas de Perrie a la lejanía en el auto también.


-¿Crees que Perrie no había chismeado aunque sea un poco?- dice Harry mientras Louis rodeaba los ojos. -Teníamos que hacerlo- dice y los trillizos ríen mientras el de ojos azules se cruzaba de brazos.


-Yo...necesito hablar con Alex antes que nada. Mañana lo puedo traer y tal vez haga muchas preguntas y por eso también agradecería si es que no puedo contestarla yo, lo hagan ustedes- dice Louis viendo a los trillizos observarse entre sí y asentir. -Entonces...¿Ahora qué?- dice el de ojos azules nervioso, mientras los tres alfas se miraban sonriendo.


-Vamos a dar un paseo- dice Harry mientras Louis asiente lentamente, mientras caminan a su lado.


Y sin darse cuenta comienzan a hablar y reír sin ningún problema, porque eran alfas y omega que se complementan.


Louis había llegado un poco tarde a la casa de Perrie, tal vez porque no podía decirle que no a los alfas. Estaba yendo a recogerlo, porque necesitaba ir para hablar con su hijo sobre todo lo que estaba sucediendo. Habían pensado en planear todo poco a poco, para que de esa forma Alex no se confunda tanto.


-Hey, Alex- dice Louis mientras su hijo lo miraba de reojo para no estropear su dibujo de una vaca, al parecer.


-¡Hey, papá! ¡Estoy haciendo un rinoceronte!- dice el chico emocionado mostrandole el dibujo.


Entonces, era un rinoceronte y no una vaca. Anotado.


-Está muy bonito como todo lo que haces. Más bien, debo hablar contigo.- dice Louis mientras el pequeño niño deja sus colores a un lado y lo mira con atención. -Mañana vamos a dar un paseo después de clases con los alfas que viste cuando saliste de la guardería hoy, vamos a dónde tu quieras y tal vez cada uno te compré un helado- dice Louis mientras el pequeño niño se levanta emocionado y asiente con prisa.


-¡Claro! ¡Será divertido!- dice Alex mientras agarra un color e intenta pintar en la mano de su papá, una estrella. -¡Te doy una estrella como mi profe Amy! Hiciste feliz a alguien, así que doy estrella- dice Alex mientras Louis suelta una pequeña risa.


-Gracias, Alex. Es muy linda. ¡La vamos a pasar increíble!- dice Louis mientras observa a su hijo bostezar y rápidamente se despide de Perrie y Jade en la cocina para luego irse a su auto hasta su casa.


Mañana sería un buen día.






Al día siguiente, Louis sale con prisa de su última clase, pues los trillizos lo estaban esperando con Perrie, aunque tuvo que acompañar a Jade para recoger a Alex. El de ojos azules camina hasta los alfas que lo esperaban afuera con una tímida sonrisa.


-Hola, omega bonito - dice Harry mientras Edward le golpea el brazo.


-Acordamos que le diríamos omega lindo- dice Marcel confundido mientras Louis se sonrojaba.


-¿Cuándo decidimos eso? Yo pensaba que estaba bien con chico precioso. Tal vez deberíamos tener uno cada uno para que no se confunda-dice Edward mientras Louis alza una ceja.


-¿Insinúas que no los reconocería? Somos alfa y omega- dice Louis confuso, mientras los trillizos se miraban sonrientes. -Ah claro, así estamos.- dice el de ojos azules cruzándose de brazos.


-Tengo una duda, es decir, todos la tenemos- dice Marcel, mientras Louis los observa confundido. -¿Por qué no nos querías si nos mandaste un audio para que te buscaramos?- dice el joven rizado y Louis los mira aún confundidos.


-Yo no envié ningún audio, ¿o sí- dice Louis mientras Harry le pasaba su celular para que escuchará el audio que le había mandado a cada uno de ellos.


"Hey, disculpa por enviarte un tonto audio, pero necesito que sepas que hay una vacante en la universidad...bueno...donde nos conocimos. Solo estaba diciéndote por si quieres aplicar. Entiendo si no quieres, pero me encantaría que postules al menos. Te extraño. Hasta luego."


-Que raro. Se me hace conocido el audio- dice Louis confuso mientras su mejor amiga aparecía a su lado con una sonrisa.


-Hey, ¿Cuándo hacemos una cita doble?- dice Perrie emocionada mientras Louis hace una mueca.


-¡Ese audio te lo mandé a ti!- dice Louis mientras Perrie hace una mueca.


-Cállate, Louis. Tengo que ir a dormir- dice Perrie comenzando a alejarse, pero rápidamente el de ojos azules lo toma del brazo. -Yo les envié el audio. Estaba harta de que Louis hablará todo el tiempo de ustedes, así que les envié el audio que me envió a mi para que aparecieran y se solucionen- dice Perrie sonriendo mientras Louis hace una mueca.


-No sé si molestarme contigo o no- dice el de ojos azules mientras Perrie suelta una risa.


-Deberías agradecerme. ¡Ahí viene Jade con Alex!- dice Perrie mientras su omega aparece con el pequeño niño que rápidamente toma la mano del de ojos azules.


-¡Hey!- dice Alex saludando con la mano a los tres alfas iguales.


-Hey- dicen los tres al mismo tiempo y Alex suelta una risa.


-Nosotras ya partimos. ¡Buena suerte!- dice Perrie tomando la mano de Jade para ir caminando hasta no ser vistas.


-Bien, Alex. Ellos son Marcel, Harry y Edward.- dice señalando a cada uno.- Nos van a acompañar a caminar y te comprarán un helado- dice Louis y Alex alza una ceja.


-¿Cada uno?- dice Alex emocionado.


-Cada uno- dice Louis mirando divertido a los tres alfas.


-Me agradan- dice Alex mientras Harry suelta una risa.


-Vamos por helado. Cualquier sabor puede ser.- dice Harry mientras Alex comienza a caminar junto a ellos.


-¿Vainilla?- dice Alex emocionado mientras Marcel lo mira confuso.


-¿Y el chocolate? Tal vez uno de chocolate. Bueno, puedes tener los que quieras- dice Marcel mientras Alex asiente.


-Chocolate también- dice Alex sonriendo.


-¿Te gusta el de fresa? Recuerda que son tres helados- dice Edward, mientras Alex suelta una risa.


-¡Fresa con chispas de chocolate!- dice el pequeño niño mientras Louis sonríe a su lado.


Edward tomaba la mano del niño que estaba emocionado con sus tatuajes y la carita feliz que tenía cerca de su cuello, diciéndole que le gustaría tener una en la frente porque fue un buen niño. Marcel estaba a su otro costado y Alex decía que el también tenía lentes en casa, pero odiaba usarlos. Por otro lado, Harry caminaba si hablar junto a Louis o no es hasta que el rizado toma su mano y le susurra algo al oído.


-Sí sabemos que es mío, pero somos trillizos, así que debes decirle que somos los tres para que no haya preferencias. Al menos por ahora y cuando sea grande le dirás o al menos eso harás con los otros dos también- dice Harry viendo a Louis alzar una ceja.


-¿Dos más? Ya me quieren embarazar y recién a pasado un día.- dice Louis mientras Harry sonríe y se cambia de lugar con Marcel.


-No es que te queramos embarazar ya.

Solo estamos comentando algo.-dice Marcel mientras Louis rueda los ojos.


-Siempre tienes algo que decir, Marcel.- dice Louis mientras el rizado se encoge de hombros.-Lo estoy considerando.- dice Louis mientras Marcel sonríe y le da un beso en la mejilla.


-Disfruta mi tierno cariño por unos minutos más que será el turno de Edward y me ha dicho que quiere meterte la lengua hasta la garganta- dice Marcel viendo a Louis abrir sus ojos como platos sonrojado para luego soltar una risa.


-Siempre disfruto tu cariño, Marcel. Aunque también disfruto el de Edward aunque no lo parezca- dice Louis mientras Marcel asiente sin dejar de caminar y comienzan a prestarle atención a Alex que comienza a hacer sonidos divertidos.


Louis sonríe, porque a pesar de que tenía miedo de enfrentarse a la realidad, lo pudo lograr y no le importaba que todos sus ex novios estuvieran ahí junto a él en este momento, porque con ellos aprendió muchas cosas, pues cada uno fue una parte importante para él y lo seguirán siendo, porque son sus alfas.


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