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Sé había planeado para esa tarde un paseo tranquilo por parte de la sirena mayor.
—jajaja, somi, deja de hacerme cosquillas, no puedo —Soltó en carcajadas —
—¡No te escaparas de mi Tritón cobarde! —ríe empezando a nadar por donde su amigo se fue—
Ya acabado el juego de las cosquillas, las criaturas empezaron a admirar la puesta de sol desde abajo del agua, se decía que había una parte en el océano donde se podía ver la puesta de sol en su máximo esplendor y se apreciaba muy bien.
Hoy iban a descubrir si era real.
El lugar se encontraba en la superficie, casi 60 metros arriba de ellos y por supuesto a la mitad del océano pacifico.
Prearandose mentalmente para salir a la superficie, Somi fue la primera en experimentar. Con su cola larga nadó y nadó, sacando la cabeza con los ojos cerrados queriendo sorprenderse.
Mientras Jimin esperaba a su amiga se recostó en una piedra, perfecta para no dejar caer su cola larga y que se lastimarla, el chico la cuidaba bien, era uno de sus atributos y no dejaría que se le dañara o que tuviera alguna escama sucia.
Ya habían pasado bastante rato y estaba cansado de no hacer nada, su amiga no daba señales y se sentía sólo ahí mismo. Iba a dormirse un rato pero a lo lejos escucho un grito distorsionado, sus instintos de supervivencia se activaron al instante, siempre listo para huir.
Temía que fueran las sirenas Skotadi, esas sirenas carroñeras y que no obedecían las reglas impuesta por el rey poseído. El sólo pensamiento de que fuera un Tritón Skotadi lo hacía querés llorar y huir de ahí pero no iba a dejar a su mejor amiga ahí sola y desamparada.
Otro grito distorsionado se escuchó, ahora más lejos, necesitaba saber que era para así pensar en un plan y que pudieran escapar ¿Qué tal si sólo era un delfin y él ahí como un miedoso? . Así que se armó de valor, la adrenalina corrió por su cuerpo y lo hizo nadar.
A unos kilómetros de donde estaba y con un poco de miedo, se refugió atrás de una piedra grande, donde se podía ve perfectamente.
—¡Eres un tonto Jimin! —Susurró fuerte para el— sólo a ti se te ocurre esto... ¡Tritón tonto!
Al fijar la mirada pudo ver a un hombre, su cabello negro y ondulado era lo que más destacaba en el agua, era lindo, Jimin no mentiría.
Esos pensamientos se esfumaron como espuma al oír otra vez el grito.
—¡¿Por qué no me comes de una vez pez tonto?!—grito hacia el lado contrario, dándole la espalda a jimin—
—¿Qué está haciendo ese humano tonto? —se preguntó a sí mismo— Mierda, ¡Si no lo detengo van a comercelo o peor, se va a ahogar! —
—¡¿Qué tan difícil es abrir tu boca y comerme?! — Escuchó decir al humano—
— ¡Hey tú , chico pelinegro! ¡¿Qué se supone que estas haciendo ahí?!
—El hombre voltea su cabeza para poder ver quién lo estaba deteniendo de su acción suicida—¿Qué?—
—¡¿Te estoy hablando a ti?! —Jimin lo señala pero sin salir detrás de la roca por miedo y precaución — ¡¿Eres tonto te vas a ahogar?!
—Ya no tengo ningún interés en la vida, ¡ya no me queda nada! —grita ahora a su dirección –
El triton extrañado de su actitud salió detrás de la roca y se pudo acercar al hombre pero siempre manteniendo su distancia
—¿Una sirena? que inusual—ladea la cabeza–una sirena no se ve todos los dias chico—sonrie— si...chico.
—¡Yo no soy una sirena, soy un Tritón! y si me vas a estar insultando enton... ¡Cuidado! —
Jimin se interrumpió a sí mismo y no alcanzó a pensar en las consecuencias cuando ya estaba nadando lo más rápido que podía hacia el chico. Un Tiburón estaba a punto de comerselos. Lo tomó del brazo junto al cuello de la camisa y volvió a nadar rápido a la superficie para que pudiera respirar aire. Lo único que deseaba era que no estuviera muerto, Jimin no sabria que hacer con un cadáver.
—¡Hey! ¡¿En que estabas pensando?! ¡¿Estas loco?! ¿Sigues vivo? —Gritó en un tono de preocupación y desesperación mientras lo sangoloteaba —
—Así que un triton... —Soltó por fin el chico sonriendo— A los ojos de jimin el hombre se veía tan guapo, su cabello mojado pegado a la cara, sus labios rojos y su pecho agitado por la acción junto a su sonrisa de lado — Es sorprendente encontrarse con una belleza pero lo siento, yo ya no tengo nada por lo cual vivir.
—Oye pero ¿Por qué dices eso? —El hombre trata se hundirse pero el Tritón ladea la cabeza curioso mientra —
—No eh encontrado con quien reproducirme—encoge los hombros y cierra los ojos—
De repente el hombre se quita la camisa por donde Jimin lo sostenía, por lo que se hunde rápido, dejando al triron confundido y asustado.
—¡Hey! ¡Te vas a ahogar! ¡todavía quiero hablar contigo! —Jimin no pudo evitar saltar del susto, se metió lo más rápido para agarrar el cuerpo del chico pero fue su sorpresa el sentir unas manos en su cintura —
—¿Acaso eres tonto?—Rie— Eres un Tritón muy tontito pero tan hermoso.
—¿Cuál es tu proble... ? —Jimin iba a hablar pero los labios del hombre lo interrumpieron—
Los 2 se fusionaron con el beso, Jimin dejando el mando al hombre, se dejó hacer. El pelinegro impuso el ritmo, ladendo el rostro de jimin para besarlo con más fervor, sus labios se rosaban de ves en cuando y sus cuerpos estaban ardiendo poco a poco. De repente el peligro se separa dejando a jimin con los labios más inchados.
—¿No te han dicho que estar solo es muy malo, aun más por estos rumbos? —Jimin aún agitado no dice nada— ¿no te han enseñado que hablar con desconocidos es peligroso ?
—Mi no-nombre es Ji-jimin...y soy un tri-ton—sonrie—
—El mio es Jungkook y mi platillo favorito son las sirenas... —Sonríe dejando ver unos colmillos y sus ojos rojos—
—N-No yo... —el pelirubio trato de salir nadando de ahí pero las manos de Jungkook no lo dejaron—
—No pequeño, no hay de que preocuparse, eres un tritón... Mi triton y vas a llevar a mis hijos... —la noticia hizo que jimin se sonrojara, del chico salieron unos tentáculos grandes y largos de color negro, ya no tenía escapatoria—
—Pero.. ¿Qué eres? —Jimin se pegó mentalmente, era obvio que un humano no podia hablar y permanecer en el agua, era aún triton tonto y despistado—
—Eso no importa ahora pequeño—
CONTINUARÁ
