Capítulo 1
Diciembre 15 Martes 1982.
Taehyung: 20
Jungkook: 18
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-Deja de hacerte de rogar Park. -Solté fastidiado al seguir observando su expresión de negación. –
-Kim tengo novio y lo amo mucho y aparte de eso lo respeto, que crees que piense cuando se entere que me bese contigo solo porque al niño le dio por saber que se siente ser besado por un hombre?, no soy tu juguete de experimentos Kim, ya confirmaste que eres gay no veo la necesidad de ahora querer comprobarlo conmigo. -Refunfuño mientras acababa de ordenar las fotos en nuestro álbum de mejores amigos, y si como él lo dijo soy gay pero era algo de lo que no estaba muy orgulloso, por la simple razón de que vivo con una sociedad tan cerrada, una que ha basado sus creencias con la biblia e incluso implementar sus castigos, lo admito es algo que me llena de pánico, saber de las bases que tienen para todas aquellas personas que incumplan con la ley de Dios, pero yo me pregunto, no es que Dios nos ama a todos? Aparte el amar no es pecado, solo es que busco el amor en una luz diferente, pero al final es igual. –
-¡Hey tierra llamando a Kim! -Dijo el castaño pasando su mano frente mi rostro. –
-No me hables.
- ¿Ahora que hice? -Pregunto irritado. –
-No quisiste reforzar la amistad.
-Kim podemos reforzarla de muchas maneras, menos de la que tu quieres que lo hagamos.
-Solo te estoy pidiendo juntar nuestros labios no te estoy diciendo que meteré mi len- -No termine de hablar y una almohada aterrizo en mi rostro. –
- ¿Kim que es ese lenguaje!? -Chillo Jimin con tanta vergüenza tapándose su rostro con sus manos y negando. – Mejor habla con tus padres para que te dejen ir a la ciudad conmigo, sabes que allá las cosas están mejor que a-
-Sabes que no puedo, ahorita vienen unas peligraciones y reuniones de la iglesia.
-Deberías igual hablar con ellos tal vez y te dejen.
-Park conoces a mis padres, ellos y apenas me dejan ir a la cafetería.
-Enserio deberías escapar de aquí.
-Lo he pensado, pero te recuerdo que tengo a mis dos hermanitos de apenas 4 años y no planeo dejarlos con dos personas que son unos monstruos.
-Tu vida si que es un caos. -Nego Park para ponerse de pie y tomar de su mochila. – Bueno querido yo si debo ir ya al hotel, mi Yoongi no tardara en llegar para irnos a la ciudad. -Dijo para darme un abrazo y dirigirse a la puerta. – Por cierto, me avisas como te va con Kook. -Al ver mi cara de molestia no tardo en salir y haciéndome escuchar sus carcajadas, Jeon Jungkook era un joven que me confundia mas que un problema de matemáticas, se preguntarán el porque, Jungkook es un joven que he conocido desde que tengo memoria, pero se puede decir que mi sentimiento de amistad ha cambiado a uno de amor, y lo se, esta mal enamorarme de alguien tan religioso como lo es el, pero para mí corazón no fue para nada malo provocarme estos sentimientos hacia el, y lo debo admitir, odio sentir esto, odio tener que amar a alguien que solo me ve como el Santo hijo del pastor, si mi padre era el pastor de iglesia, por ende siempre tengo que cuidar mi forma de actuar y hablar porque si no lo hiciera estaría metido en graves problemas. -
...
-Palabra de Dios.
-Te alabamos señor. -Apenas respondieron solo baje de las escaleras para salir de ahí, siempre que terminaba la lectura debía salir de ahí rápido para irme a mis clases de artes, y por otro lado había algo que me tenía emocionado, ya era 28 de diciembre, y Park llegaría mañana para festejar mi cumpleaños, aunque lo triste es que Yoongi no podría venir. -
-Hey Kim! -Apenas escuche esa voz mi mente se puso en blanco, era Jungkook. -
-Hola Jungkook. -Salude con una sonrisa tratando de calmar los nervios que comenzaron a invadirme. -
-¿Como estas?, disculpa por haberte llamado así es que supe que irías a la clases de Artes así que quería saber si podíamos ir los dos.
-Claro vamos. -Dije paran comenzar a caminar, no tarde en escuchar como aceleraba su paso para terminar a lado mío. -
-¿Y como ha estado Jimin? -Pregunto para verme, si Jeon lo conocía, antes éramos amigos los tres pero dejamos de serlo cuando Jeon se alejó de nosotros desde que conoció a Félix, y Jimin dejó de ser amigo de el desde que se trasteo a la ciudad, con el único que siempre mantuvo comunicación fue conmigo. -
-Ha estado muy bien, mañana viene de la ciudad para festejar mi cumpleaños.
-Oh que bien, si escuche que tu mamá te hará una gran fiesta. -Apenas escuche eso solté una risa. -
-No se si se podría llamar fiesta a lo que hace mi madre pero si, celebrarán mi cumpleaños.
-¿Te molesta si voy? -Apenas dijo eso lo mire de inmediato. -
-¿Quieres ir?
-Claro, después de todo fuimos amigos.
-Mm pues si, entonces me es un placer invitarlo señor Jeon a la mejor fiesta del año.
-Muchas gracias por la invitación señor Kim. -Dijo con una sonrisa, esa sonrisa, la sonrisa más bonita que he podido ver en toda mi jodida vida, podía quedarme viéndolo por horas, era hinoptizante ver el hermoso rostro de Jeon, pero ese momento paro cuando el desvío su mirada viendo frente a nosotros, rápidamente dirigí mi mirada a frente y comencé a maldecir como un loco en mi cabeza a ver quién había llegado, era Félix. -
-Hola Jungkook. -Saludo con una sonrisa para acercarse a Jeon y darle un corto abrazo el cual Jeon no tardó en corresponder con una sonrisa, ganas de irme me dieron. -
-Hola Félix, mira te pres-
-Ya se quien es pequeño. -Aviso para verme. - Como no reconocer al hijo del pastor, al gran ejemplo de Yangsan. -Comentó con una sonrisa que para mí fue de burla. - Hola Kim.
-Hola. -Respondi el saludo cortante para después ver a Jungkook. - Jeon no es por apurate pero tenemos una clase de Artes en menos de media hora, y no me apetece llegar tarde.
-¿Oh van al Instituto? -Pregunto Félix. -
-Pues es más que obvio que si no? -Dije con obviedad. -
-Tae esa no es la forma correcta de responder. -Me regaño Jungkook, genial y no le dijo nada a ese idiota de la forma en que me trato. -
-Si quieren los puedo llevar. -Ofreció. - Tengo mí auto a unas cuadras así llegaran más rápido.
-No gracias estamos a tiempo si nos vamos ya. -Dije para ver a Jeon. - Vamos. -Sin más comencé a caminar y la voz de Jeon me freno haciendo que lo viera. -
-Lo siento Tae pero aceptó la oferta de Félix, dudo que podamos llegar a tiempo yendo a pie, y si no llegó temprano le avisan a mí madre y me r-
-Entonces nos vemos allá, hasta luego. -Me despedí para comenzar a caminar a un paso rápido, por una razón me sentía dolido, Jungkook había cambiado mucho desde que había conocido a Félix, siempre ese tipo me ha dado tan mala espina pero de que me serviría decirle eso a Jeon si lo defendía como si fuera su novio... Novio..? No, Jeon jamás se fijaría en un hombre, ese chico siempre se ha destacado por su buen comportamiento y por la forma en que hace respetar la ley, un ejemplo es que el trabaja en las bases de castigo, donde el dueño de esos lugares horribles es su abuelo, se preguntarán en que consta esas bases, esas bases son las encargadas de absorverte todos los pecados, cuando ibas a confesarte con el pastor osea mi padre te daba un castigo el cual si o si debías cumplir, y si no lo hacias eso hacia que tu imagen fuera totalmente dañada e incluso soportar que de todas partes te expulsaran y te trataran como una mierda completa, tu salud mental se jodia en todos los sentidos. Pero aparte de eso y para no ser suficiente el joderte emocionalmente había rumores de que las personas que no cumplen con el castigo que les da la iglesia se han llegado a encontrar muertas. Diran el porque esas personas mejor no se confesaban o se iban del pueblo, pero no era nada fácil. Todos los martes de cada dos semanas habían confesiones obligatorias, llegaban pastores de otras iglesias y todos se dividian a ir en casa por casa para confesar a todos, y las personas que no estuvieran en casa las anotaban en una lista para ver en que día de la semana los podían encontrar. Yangsan es un pueblo muy pequeño, por ende todos nos conocemos con todos y ninguno pasa por desapercibido, aparte de que este pueblo es humilde y la mayoría que han querido irse les ha quedado muy difícil por la cuestión del dinero, pero ese ha sido más el problema de jóvenes que de adultos, los adultos siempre han tenido la misma idea que sus antepasados, la misma ley, mismas reglas, pero la mayoría de jovenes de aquí han notado que todo ese sistema esta jodidamente mal, pero hay algo, y es que acá jamás cuenta la palabra del joven, nos consideran personas inexpertas y con poco conocimiento, aparte el llevarle la contraria a alguien sobre la iglesia era como meterte en la boca del diablo, apuntó de morir. Y lo se, enserio es horrible vivir en un lugar así, con este tipo de personas, aunque más la palabra de vivir era el tratar de sobrevivir. -
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By: Wintbear
-No se aceptan copias ni adaptaciones.
